En tiempos de empoderamiento, de políticas de equidad de género y revisión de clichés atávicos construidos a partir de prejuicios y arbitrarias asignaciones de roles, una importante automotriz comenzó a asignarle a las mujeres una actividad industrial hasta ahora únicamente reservada a hombres: la conducción de autoelevadores, conocidos en la jerga fabril como “el clark” o “el Sampi”, en alusión a dos de sus marcas más difundidas y, por tal motivo, devenidas en genéricos.
Según informó oficialmente, “en el marco de la estrategia de capacitación y las políticas de diversidad, Mercedes-Benz Argentina es la primera empresa automotriz en dar un lugar a la mujer en la conducción de autoelevadores”. La automotriz precisó que el área de Recursos Humanos junto con la de Logística del Centro Industrial Juan Manuel Fangio, Virrey del Pino, partido de La Matanza, “organizaron una capacitación para que las operarias puedan conducir los autoelevadores. Actualmente, en nuestro país, es una tarea realizada únicamente por hombres”.
Gustavo Castagnino, director de Relaciones Institucionales, afirma: “Es para nosotros un gran orgullo dar este paso como industria. Es un proyecto en el que venimos trabajando hace más de dos años y que hemos podido, conjuntamente con la Comisión directiva de Logística y SMATA, concretar este año. Mercedes-Benz trabaja constantemente para la formación de sus empleados, y esta iniciativa es un reflejo de los valores de la compañía.”
La capacitación estará a cargo de la Federación Argentina de Entidades Empresarias de Autotransportes de Carga (FADEEAC) y se realiza desde el 22 de octubre hasta el 2 de noviembre, con un total de 80 horas de entrenamiento. En esta primera etapa, forman parte de la instrucción seis empleadas de Mercedes-Benz Argentina.